España, agosto de 2022
Cualquier empresario o emprendedor persigue y anhela a partes iguales que sus trabajadores sean productivos y estén satisfechos con sus empleos. Para esto, hoy en día, se considera fundamental que cualquier compañía tenga un plan de incentivos, sea cual sea su tamaño, número de empleados, sector… Algo que es más importante si cabe en una startup con cierta proyección a futuro.
“En las startups se busca acoger al nuevo talento de la ‘Generación Z’ (los nacidos entre 1994 y 2010). Esta nueva generación está cambiando las reglas tradicionales del liderazgo y de los departamentos de recursos humanos de las compañías, y reclaman un interés por formar parte del proyecto, lo que se consigue a través de phantom shares”, explica Pol Gomà, fundador y CEO de Capboard, plataforma diseñada para gestionar equity, inversores y planes de incentivos en Europa.
Según un informe de Deloitte sobre las tendencias mundiales del capital humano, los beneficios y el trabajo significa más que dinero para los empleados de la Generación Z. Los pertenecientes a ella dan muestras de querer satisfacer la necesidad de pertenencia e identificación con la empresa donde desarrollan su trabajo para que este tenga significado y propósito.
Lo cierto es que, incluidos los de esta Generación Z, los trabajadores que gozan de incentivos son un 31% más productivos como el plan de retribución en acciones. Así lo indica un informe del Wall Street Journal junto al Opener Institute for People & Performance que señala que en esta materia reflejan la importancia de que las empresas sean proactivas a la hora de emprender planes de incentivos para mejorar el clima laboral, la conciliación y la motivación de sus trabajadores.
Además, según cifras de Deloitte, la productividad mejora entre un 4 y un 5% tan solo en el primer año después de la adopción de un plan de retribución en acciones, así como las empresas con un plan en este sentido registran un 25% más de crecimiento durante los 10 años posteriores.
“Mientras el sector del equity management está muy desarrollado en Estados Unidos y Asia donde se han producido diversas operaciones entre grandes compañías, el sur de Europa lleva años de retraso en la gestión de equity en empresas privadas”, afirma Pol Gomà que destaca que “la incorporación a las empresas una herramienta como Capboard puede acelerar la adopción para acercarnos a los países anglosajones”.
En cuanto al futuro del sector en España, los expertos de plataforma diseñada para gestionar equity, inversores y planes de incentivos en el Viejo Continente sostienen que “España a día de hoy está a la cola en cuanto a planes de incentivos, por debajo de Polonia o Italia. La nueva ley de startups será una oportunidad para las stock options, ya que se prevé que aumente la deducción hasta los 50.000 euros anuales y se retrase el momento de liquidación al momento de la venta de la empresa”.