La contratación silenciosa puede aportar valor a una empresa si en la estructura organizacional se crea el espacio necesario para que se dé y mantenga. El líder disruptivo es la figura clave capaz de lograr un quiet hiring eficiente y que lleve al crecimiento del negocio, explica Carme Castro, CEO de Kainova y experta en liderazgo disruptivo y empresa líquida
España, marzo de 2023
En un entorno laboral en constante cambio, motivado por la incertidumbre económica y la digitalización del trabajo, el quiet hiring se impone como un salvavidas y puede aportar valor a una empresa. Y es que, las organizaciones quieren seguir digitalizándose y continuar innovando, sin embargo, la crisis y la inflación no son el mejor escenario para llevar a cabo grandes contrataciones de personal.
Por lo que, el quiet hiring o la contratación silenciosa se ha convertido en la nueva tendencia porque responde perfectamente a este entorno cambiante e incierto que exige a las empresas, si quieren sobrevivir y crecer en él, una ágil y rápida adaptación. Y es que, si bien en un sistema tradicional la cultura organizacional se estructuraba sobre la búsqueda y contratación de perfiles especializados que aportaban el máximo conocimiento y eficiencia a cada nueva necesidad, un entorno de constante cambio no permite a las organizaciones seguir este patrón para responder a cada nueva e inesperada situación. Por eso, la contratación silenciosa se presenta ahora, más que nunca, como una respuesta óptima que permite que nuevas tareas o funciones sean asumidas por trabajadores que ya se encuentran en plantilla.
Sin embargo, esta nueva tendencia que parece ser beneficiosa para la empresa ¿lo es también para los empleados? ¿Cómo hacer que este tipo de contratación sea un win-win para todos?
Contratación silenciosa y liderazgo disruptivo. Un win-win para empresa y empleados
Por ello, la empresa líquida, la que ha comprendido que su estructura y operativa deben ser flexibles y adaptables, tiene como uno de sus fundamentos el liderazgo disruptivo. Un estilo de liderazgo que, siempre en pro de esa adaptabilidad y flexibilidad basadas en el talento, busca de manera continua el despertar y desarrollo del talento de las personas en las organizaciones. Lo estimula y promueve.
“Ser líder es una actitud, y ser líder disruptivo es una actitud con nuevas habilidades que crecen como consecuencia de las nuevas formas de pensar y comprender la función de las personas y sus talentos en una empresa. En nuestro contexto actual, apostar por el talento es apostar por generar una gran ventaja competitiva inimitable”, añade Carme Castro, CEO de Kainova, premio europeo en Innovación en la Gestión del Talento y experta en liderazgo disruptivo y empresa líquida.
Si algo tiene claro el líder disruptivo, es que es a través del despertar y desarrollo del talento que se posibilita y nutre la optimización de los negocios, pero también la apertura a nuevos, a través de nuevas líneas o áreas que ahora pueden crearse con las mismas personas que ya formaban parte del equipo. Por lo que, el quiet hiring bien gestionado puede llegar incluso a suponer un incentivo y motivación para los empleados que sobre todo están interesados en desarrollar competencias y experiencias nuevas, mediante la colaboración en otras tareas para seguir creciendo. Sin embargo, para que esto suceda y que el quiet hiring pueda aportar valor a la organización es esencial que exista una estructura organizacional que cree el espacio para que se dé y mantenga.
Su visión y capacidad de entrenar a sus equipos para llevar el talento de la organización a un estado de “ebullición del talento”, se produce gracias a la articulación completa de todos los fundamentos de la empresa líquida.
Ante la perspectiva de avanzar en esta dirección, Castro destaca, “es importante contar con profesionales expertos en hacer surgir el talento, profesionales que sepan hacerlo estableciendo las bases que no se limiten a hacer brillar a los talentos, sino que articulen el sistema que jamás pierda de vista que lo que tenemos entre manos es un negocio. Dar con el binomio clave: Talento-Rentabilidad. El crecimiento de las personas garantiza el crecimiento del negocio”.