Participar en un proceso de crowdsourcing es tan sencillo como haber evaluado a un conductor de Uber, etiquetado su ubicación en Facebook, agregado una imagen a Google Maps o realizado una encuesta de Amazon. El crowdsourcing es un modelo mediante el que una empresa desarrolla un producto, proyecto o servicio a través de la recopilación de ideas, sugerencias y opiniones de un gran número de personas.
Este enfoque se puede poner en práctica en una compañía, no sólo involucrando a clientes o público en general, sino también a los empleados, descubriendo así que las soluciones para resolver diferentes situaciones empresariales, pueden provenir de los propios recursos internos de la empresa, fomentando el sentimiento de responsabilidad e implicación en los procesos creativos y de innovación.
Los pasos a seguir para lograr resultados positivos en una actividad de crowdsourcing son:
1. Feedback con feedback: Estableciendo la confianza. Las encuestas o sondeos a los empleados son importantes, dan el pulso de cómo se sienten las personas hacia la organización, en cuanto a gestión y entorno laboral, y explican el porqué. Es clave que las personas confíen en el proceso y estén dispuestas a colaborar, y por su parte la empresa debe ser transparente y no tener miedo a cierto volumen de comentarios o ideas inadecuadas. De esta forma, se fomenta la creación de un canal de comunicación responsable y productivo.
2. Capitalizar las habilidades de los empleados. Tanto el personal de atención al cliente o de asistencia técnica, como el del front-end y el área digital, interactúan diariamente con los clientes y es obvio que conozcan mejor sus necesidades, mas que un directivo que dedica su tiempo a otras tareas de carácter interno. De ahí que dar a conocer los desafíos a los que se enfrenta la compañía a toda la organización, y hacer partícipes a los empleados solicitando su aporte de ideas innovadoras, es una forma de materializar el crowdsourcing, capitalizando el conocimiento especializado existente.
3. Cambiar las conversaciones en la empresa. Compartir conocimiento dentro de la empresa es una nueva forma para que los empleados se comuniquen y expresen, fomentando la creatividad y la colaboración entre áreas.
4. Convertir a los empleados en socios estratégicos. A los empleados les gusta tener voz, pero escucharlos no es suficiente; necesitan saber que su feedback tiene valor y podrá utilizarse para definir nuevas estrategias de mejora. El crowdsourcing interno permite a un empleado expresar sus ideas, con el orgullo de saber que contribuirá a la mejora de un proceso particular o incluso al futuro de su organización. Cuando este proceso se da de forma recurrente, y existe claridad y transparencia, los empleados incrementan su compromiso y responsabilidad.
5. Aprovechar la creatividad colectiva de la organización. El poder creativo que puede surgir a partir de la diversidad del personal, no debe subestimarse y puede ser una fuente de cambio y desarrollo de la empresa. No hay que olvidar que, en un momento en el que a diario se cuestionan los viejos modelos de negocio, el reto es buscar nuevas formas, ideas innovadoras y disruptivas, de forma rápida y eficiente.
6. Ruptura de jerarquías. El crowdsourcing permite a cualquier empleado presentar su punto de vista, que ayudan, además de a buscar nuevas ideas y soluciones, a crear nuevas culturas de trabajo menos centradas en las configuraciones organizativas, y más en la innovación y obtención de resultados.
7. Empoderar a los empleados. Cuanto más complejo es un entorno, más importante es distribuir la capacidad de decisión en los equipos, pero manteniendo siempre un objetivo como organización claro que alinee los diferentes esfuerzos y acciones, así como criterios básicos que describan claramente el concepto de éxito. Una estrategia de equipos empoderados, exige respeto y confianza y, aunque puede ser un reto importante para muchas organizaciones, es definitivamente un elemento transformador para una compañía.
“El crowdsourcing es una excelente manera de interactuar con los públicos objetivos para la organización, comenzando con el personal que es el alma de cualquier negocio. Destacar las opiniones de los empleados y utilizar sus conocimientos multiplica las posibilidades de encontrar ideas que conduzcan a aumentar la eficiencia y las ventas, reducir los costes y, ante todo, mejorar la vida de nuestros clientes. En todo ello, la tecnología juega un papel fundamental a la hora de escuchar lo que los empleados tienen que decir y proponer”, observa Igor Romero, Solution Principal de Medallia. “Por este motivo Medallia ha creado Crowdicity, una plataforma de colaboración que permite a las empresas recoger ideas dentro de la organización. También sirve para crear programas internos como concursos de innovación o hackatones, estimulando así la interacción de todo el personal y la colaboración”.